sobre políticas identitarias
Por Ileana Medina Hernández
Las políticas identitarias están abocadas al fracaso y al caos, porque las identidades pueden fragmentarse hasta el infinito, y desde lo subjetivo. La inmensa cantidad de categorías en lo sexual, y las actuales polémicas entre los feminismos y los queer son la muestra de cómo podemos clasificarnos, culpabilizarnos y victimizarnos unos a otros ad eternum, en un callejón sin salida, de un modo que el sistema legal no puede asumir.
Ni las políticas ni las leyes pueden basarse en la identidad de las personas.
No pueden basarse en quién eres, ni mucho menos en cómo te nombras, sino en los hechos que ocurren.
Lo que es violencia o es maltrato, lo es en todo caso o circunstancia, igual para todos. Y ya está.
Esta verdad de perogrullo hoy está considerada "facha" cuando es justo lo contrario, es el fascismo el que siempre se basó en lo identitario... Constantemente las "víctimas" caen en la trampa de pensar del mismo modo que el opresor, porque salirse del eje es lo verdaderamente complicado.
Ni las políticas ni las leyes pueden basarse en la identidad de las personas.
No pueden basarse en quién eres, ni mucho menos en cómo te nombras, sino en los hechos que ocurren.
Lo que es violencia o es maltrato, lo es en todo caso o circunstancia, igual para todos. Y ya está.
Esta verdad de perogrullo hoy está considerada "facha" cuando es justo lo contrario, es el fascismo el que siempre se basó en lo identitario... Constantemente las "víctimas" caen en la trampa de pensar del mismo modo que el opresor, porque salirse del eje es lo verdaderamente complicado.
Ilustra: Grotesque scene by the Dutch artist Arent van Bolten, early 17th century
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