Rene Magritte: The Blank Signature

 


Rene Magritte: The Blank Signature

Noche de sinceridad brutal. Total es tarde y nadie lee. “Todo me sale mal” A todos seguramente no habrá pasado tener una época en la que nada de lo que propusimos hacer salió como queríamos. Parece que todo el mundo está conspirando contra nosotros o, también, que dejamos de ser competentes y pasamos a ser buenos para nada. Suelen ser rachas normales. Pero ¿qué pasa cuando las decepciones son continuas, se prolongan en el tiempo y parecen no tener fin? Son momentos de dolor y cuestionamientos personales: ¿qué es lo que nos llevó a esa situación? ¿Es consecuencia nuestra, de los demás, compartida? Ahí es donde nos bloqueamos y amargamos más aún por el estado negativo en el que nos encontramos, las frustraciones nos nublan la vista y no nos dejan ver la luz al final del túnel. “Todo me sale mal” Pero ¿Por qué? ¿ Qué pasó? ¿ Qué hice mal? Lo más sencillo sería atribuirlo a la mala suerte, que sabemos que existe, pero no solo no es medible e incomprobable, sino que sería simplificar y no asumir ninguna responsabilidad. La mayoría dependen de nosotros mismos pero también existen elementos externos (la economía cae, una desgracia que ocurre) que afectan profundamente nuestra vida. “Todo me sale mal” Y nadie me entiende. Y es que nadie te entenderá. Nadie está en tus zapatos. No lo pueden dimensionar, “a todos nos pasan cosas”. Y eso también duele, sobre todos de quienes más esperas. Así que no esperes más. Depende sólo de vos. “Todo me sale mal” Y se repite consecutivamente. Se obtienen malos resultados en forma reiterada y no se puede modificar. Y como ocurre a veces en los juegos, como el póker, esa frustración y esa necesidad de recuperarte, pueden llevarte a tomar decisiones precipitadas, cometer más errores y entrar en un espiral negativo. Puede ser por ansiedad y acción desmedida o por el contrario por decaimiento y paralización. Hay que salir de ahí lo antes posible. Lo primero es darse cuenta que te está pasando. Y si tu mente está alterada y no podes pensar con claridad ni actuar correctamente, no tomar decisiones importantes. Parar, poner la mente en blanco, desconectarte de los dispositivos 🙄, dormir….Y recién después ver con claridad que podes hacer de ahí en adelante. Confieso que estoy atascado en la primera etapa. Pero soy consciente. Y claramente no logro desconectarme nunca. Sin duda el mayor riesgo cuando atravesar esta etapa en la que todo te sale mal, es el llegar a un punto en el que estás tan frustrado que todo te da igual. Te decís a vos mismo: “si ya estoy en el baile, tengo que bailar!” y haces cualquier cosa como si no tuviera consecuencias. Porque total, “¿qué le hace una mancha más al tigre?” Y es un gran error. Siempre hay consecuencias. Para nosotros y para quienes viven cerca nuestro. Y no todo siempre se puede recuperar después. Porque todos tenemos días malos Porque todos tenemos épocas malas (aunque para algunos nos parezcan eternas) Pero son situaciones pasajeras y tarde o temprano, las cosas vuelven a la normalidad, no necesariamente a la normalidad que tenían antes, seguramente a una nueva normalidad. Y porque, finalmente, recuerden siempre que a lo largo de toda nuestra vida todos portamos invisiblemente el anillo del relato del Rey Salomón, el que lleva la inscripción “GZY: Gam Ze Yaabor - Esto También Pasará”: nunca dejes de mirarlo. Esta canción me representa Los que me conocen saben que soy un poco así. Un poco bastante. Que descanses y sueñes con los angelitos Lo mejor está por venir 💙




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