HISTORIA DEL MUERTO SIN NOMBRE

 


HISTORIA DEL MUERTO SIN NOMBRE

Por Juan Carlos Recio
Margarita García Alonso ha escrito:
"Ay Cira, la Normandía es el país de los "hombres del norte", de los vikingos, y seguro que de aquellos vikingos que formaban mucha bagarra en la casa y los echaban al mar, a su suerte, aquí si dices "buenos días" y sonríes a la gente, piensan que eres extranjera o loca , y cuesta bastante aprenderse el acento del norte, y el dialecto:" buju", por bonjour, o "avaoui", para cualquier cosa donde afirmes. Bueno, te cuento, en las navidades y fin de año, se supone que la gente este feliz, pues yo regresé de Madrid un 10 de enero y estuve tres meses preguntando por el insoportable de vecino y nadie sabía, hasta que amenace a la guardiana con llamar a la policía y, efectivamente, esta vino y el señor hacia seis meses que estaba muerto y nadie se enterô, ni siquiera en esas fiestas y como hace frío no había ni olor… que te parece?"
El pasado invierno en Normandía
el vecino de Margarita
que no supimos
si murió de amor ni de nostalgia
que tampoco fue hallado por el olor
por esas particularidades del destino
seis meses después
y por insistencia de Marga
lo encontraron cádaver
sin que las fiestas navideñas
o alguna otra solidaridad de turno
pudieran entenderlo;
"el muerto sin nombre"
al menos no escuchado al viento
aunque insoportable quizás
no cabe en los manuales
de los buenos días
u/ otra calificación
de lo más elemental de los sentimientos;
el vecino de mi amiga
por muy primitivo que pueda parecernos
es dentro del episodio
esa zona ininteligible desapasiones
donde un individuo es un extraño
si aplica ciertos códigos de vecindad
para que luego no salte
por alguna cerca extraviada
o algún jardín incoloro
fantasmas que nunca pidieron
pasar desapercibidos.
El pasado invierno esto ocurría
y hoy en la mañana al enterarme
busqué un pretexto no muy convicente
para tocar en la puerta a mi vecina
y alcanzarle un New York Times
con tinta de las noticias, recién impreso.

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