Ese maldito yo
Zenobia Camprubí a Juan Ramón Jiménez: "Quiero que te refugies en mí contra toda desilusión y contra lo mediocre y mezquino de la vida".
ante declaraciones tan hermosas, recordé a Emil Cioran, en 'Ese maldito yo', extremadamente contrario y solté carcajada Una forma diferente de juzgar la sociedad:
"Amar al prójimo es algo inconcebible. ¿Acaso se le pide a
un virus que ame a otro virus?".
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