Muérete, el ejército de Rojas ataca

 

Los nombrables, los intocables putos y santas de la Literatura cubana chorrean impúdicos en la plazoleta Roja.

Sándor Márai dijo : «En la literatura no existe la democracia; sólo hay solistas»

Los Medios y editoras, dependientes de Grants y Soros, se justifican con la idea solidaria de visibilizar, exclusivamente al artista/escritor en peligro. Una especie de telenovela latina que condensa a La santa y al Puto en el altar de la Patria, para protegerlos del nefasto monstruo que, por dislexia política, no pueden nombrar Dictadura.

Fuera de contexto, por completo. Les han implantado en el exilio para mover el batido competitivo, por los mismos que desde antes se encargaban de situarse y la obra no les acompaña, a pesar del cargo, el tiempo y el dinero que les cubrîa sin doblar el lomo en el capitalismo. Incluso, la nueva obra que enzalzan, ha sido redactada después del galardón y la fama, elevada a sacro rango por el mismo equipo.

El Comité inquisitorial de Izquierda, desde hace dos décadas sustenta la exclusión social y la obra literaria de exiliados no existe en sus Tratados Sociolistos del Ombligo y la Paja .

Para lograr tal proeza han pisoteado una montaña de libros, a personas, repiten variantes cacofónicas académicas, distribuyen premios, entrevistan, contraentrevistan, crean especialistas literarios, historiadores de marranadas progres, y ven novedad en los desquicios pueblerinos, sin plaza en la literatura universal.

Lo que llaman 'visibilizar' es el terrible Programa con morbo que ha creado la indecorosa 'élite cubana del socialismo pro democracia' utilizando la censura, suprimiendo a los solitas de ambas orillas.

La Biblioteca incompleta de la literatura cubana, parasitada por la oscuridad fascista de Rojas, Rialta, Hypermedia, Cibercuba, etc, etc.no se detiene, salgan los cubanos a manifestar, se muera media isla por la epidemia, la malignidad envenena los últimos dias de creadores,las últimas escrituras con decencia, para dar paso a la cantaleta, la rasquera, la autoleyenda dentro de la sucursal de falsedades puteadas con compàs zurdo.

Aleluya, Réquiem por el alba de Cuba, amanecer negruzco en la punta de la lengua del oportuno arribista.

y el PROFETA ROJAS DANDO ORDENES A RIALTA, LA UNEAC DEL EXILIO