UNA VIDA DE PUEBLO

 CREPÚSCULO⠀

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Trabaja todo el día en el molino del primo,⠀

así que al llegar a casa, en la noche, 

siempre se sienta junto a la ventana, ⠀

Observa ese momento del día, el crepúsculo. ⠀

Debería haber más tiempo así, para sentarse y soñar.⠀

Es como dice su primo:⠀

Vivir-Vivir te impide sentarte.⠀

En la ventana, no el mundo, sino un paisaje enmarcado ⠀

que representa el mundo. Las estaciones cambian,⠀

cada una visible apenas unas horas al día. ⠀

Cosas verdes seguidas por cosas doradas seguidas por blancura,⠀

abstracciones de las que provienen los placeres intensos,⠀

como higos en la mesa.⠀

Al atardecer, el sol cae entre dos álamos, 

en una bruma de fuego rojo.⠀

Cae tarde en el verano, 

a veces cuesta mantenerse despierto. ⠀

Entonces todo se desmorona.⠀

Por un rato más, el mundo⠀

es algo que ver, luego sólo algo que escuchar,⠀

grillos, cigarras.⠀

O algo que oler, a veces, aroma de limoneros, de naranjos. ⠀

Entonces el sueño también roba esto.⠀

Pero es fácil renunciar a las cosas así, experimentalmente,⠀

por una cuestión de horas.⠀

Abro mis dedos,⠀

dejo que todo se vaya.⠀

Mundo visual, lenguaje, ⠀

susurro de hojas en la noche⠀

el olor de la hierba alta, de las fogatas. ⠀

Lo dejo ir. Entonces enciendo la vela.⠀

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Louise Glück⠀

Una vida de pueblo⠀