La montaña mágica pdf
"Yo no me ataré ni al partido de Naphta ni al de Settembrini... ¡ Singulares pedagogos con su eterno problema de la presencia! La vida o la muerte, la enfermedad o la salud, el espíritu o la naturaleza... ¿Son éstas antinomias? ¿Son siquiera problemas? No, no son problemas. La muerte, con todas sus vergüenzas, está instalada en el corazón de la vida y no habría vida sin ella, y el lugar del horno Dei está entre ambas, a medio camino de la vergüenza y de la razón, lo mismo que el Estado es el término medio entre la comunidad mística y el individualismo acendrado.
Thomas Mann
La montaña mágica (fragmento)
Commentaires