La abeja laboriosa no tiene tiempo para la tristeza .
William Blake
1. No aceptar las actitudes paternalistas de los autores mayores. Ellos también fueron jóvenes y, con toda probabilidad, bastante más indocumentados.
2. La tradición no pesa: invita. Escribimos mientras leemos. La escritura es una forma suprema de relectura.
3. Ensayar, errar y repetir. Un manuscrito malo es mucho más valiente que un supuesto genio que se abstiene por si acaso.
4. Corregir hasta el límite de la paciencia, que cuanto más corregimos más se amplía.
5. Recordar que todos somos principiantes: la escritura es un arte inaugural y, por tanto, carece de expertos.
6. No aceptar seis consejos de nadie. Uno ya es un abuso.
Andrés Neuman
OLEO:Magdalena Laskowska - Slow life.
Commentaires