‘Dolor y gloria’ a la heroína
‘Dolor y gloria’, de Pedro Almodóvar, con un excelente trabajo de interpretación de Antonio Banderas en el rol del alter ego de Almodóvar.
Dinero perdido, uno y el otro me caen de bala, el izquierdismo feroz es vomitivo en ambos, y el tema: "director de cine en crisis", muy visto : ‘Memorias de un seductor’ (Woody Allen, 1980), ‘La noche americana’ (Truffaut, 1973) o ‘Fellini, ocho y medio’ (1963), sin que llegue a medio pelo de las cintas mencionadas.
El resto idem, personajes "teatrales", enfermedades, en fin, en esta entrevista él dice lo que quiere que repita la prensa y ustedes van a leer hasta que aprendan el libreto.
Y no se priva, utiliza los servicios de un grafista, bravo dentro de la profesión, para que explique cada enfermedad: catarro, depresiones, operaciones, zumbidos de oídos, todo un corolario de males y dolores, no apto para angustiados de mi tipo.
En el filme remete un monólogo de diez minutos de su excelentísima persona sobre las adicciones, y expone su deseo homo desde muy temprano. De paso, en la escenografía aparece, en un parque madrileño, la hoz y el martillo, buf, con el puñito de podemos y las feministas actuales.
Un goce mirar al excelente actor Axier Etxeandia en el papel del" rival en el cine", quién, a pesar de remeter droga hasta por las orejas, presenta una forma corporal a chuparse los dedos; el ex amante hyper seductor, ahora es bisexual fluido, la amiga empresaria, la mamam en detalles de despedida, etc, etc.
De paso, si usted no "se pone" para la heroína porque le impresionó
Trainspotting,
el filme inglés donde la preparan con una cucharita, pues en Dolor y gloria, el cursillo es gratis y repetitivo, aprenda a "ponerse" con papel de aluminio.
Lo merezco por caer en "no has visto el último Almodóvar?" A olvidar inmediatamente y no leer los comentarios que voy a encontrar en Facebook. NO.
Dinero perdido, uno y el otro me caen de bala, el izquierdismo feroz es vomitivo en ambos, y el tema: "director de cine en crisis", muy visto : ‘Memorias de un seductor’ (Woody Allen, 1980), ‘La noche americana’ (Truffaut, 1973) o ‘Fellini, ocho y medio’ (1963), sin que llegue a medio pelo de las cintas mencionadas.
El resto idem, personajes "teatrales", enfermedades, en fin, en esta entrevista él dice lo que quiere que repita la prensa y ustedes van a leer hasta que aprendan el libreto.
Y no se priva, utiliza los servicios de un grafista, bravo dentro de la profesión, para que explique cada enfermedad: catarro, depresiones, operaciones, zumbidos de oídos, todo un corolario de males y dolores, no apto para angustiados de mi tipo.
En el filme remete un monólogo de diez minutos de su excelentísima persona sobre las adicciones, y expone su deseo homo desde muy temprano. De paso, en la escenografía aparece, en un parque madrileño, la hoz y el martillo, buf, con el puñito de podemos y las feministas actuales.
Un goce mirar al excelente actor Axier Etxeandia en el papel del" rival en el cine", quién, a pesar de remeter droga hasta por las orejas, presenta una forma corporal a chuparse los dedos; el ex amante hyper seductor, ahora es bisexual fluido, la amiga empresaria, la mamam en detalles de despedida, etc, etc.
De paso, si usted no "se pone" para la heroína porque le impresionó
Trainspotting,
el filme inglés donde la preparan con una cucharita, pues en Dolor y gloria, el cursillo es gratis y repetitivo, aprenda a "ponerse" con papel de aluminio.
Lo merezco por caer en "no has visto el último Almodóvar?" A olvidar inmediatamente y no leer los comentarios que voy a encontrar en Facebook. NO.
#marga
Commentaires