Por Jacobo Machover ¡Qué golpe ni golpe!

Por Jacobo Machover

¡Qué golpe ni golpe! Lo que pretenden los Gobiernos de Cuba, Venezuela o Nicaragua, grandes democracias latinoamericanas, como se sabe, es hacer creer a los ingenuos regados por el mundo que Evo Morales, « elegido » por mayoría inventada después de un fraude chapucero (sabiendo que ni siquiera se podía haber vuelto a presentar, según su propia Constitución) ha sido derrocado por los militares, cuando en realidad fue sacado a patada limpia por los bolivianos, civiles y uniformados. 

El cocalero (él mismo reivindica esa función) se sigue autodenominando en Twitter  « evoespueblo », como megalómano que es, habiendo declarado su casa natal como monumento nacional. Lo peor es que varios Gobiernos democráticos, por no hablar de los « insoumis » o los « podemitas », les siguen la corriente a Raúl Castro y Díaz-Canel, a Maduro, a Ortega. 

AMLO, otro presidente « sui generis », cómplice de los narcos asesinos en su país, México, le ofreció el asilo. Así el ex presidente podrá darle una orientación ideológica a los cárteles de la droga, responsables de decenas de miles de muertos. 

Pero ¿qué hace en esa compañía el ministro español de Exteriores, quien por otra parte no ve ningún problema, en medio de la situación política inextricable que vive España, en enviar a los reyes Felipe VI y Letizia a Cuba, donde no hay nada que pueda parecerse a una democracia desde hace… 60 años ? Estos van a celebrar los 500 años de La Habana, una ciudad destruida y arruinada por el castrismo. 

Quién sabe si no se van a cruzar allí con el depuesto presidente boliviano, que hizo de Cuba durante casi 14 años de mandatos fraudulentos su segunda residencia, junto a sus mentores Fidel y Raúl Castro. Se consolaría viendo cómo lo reciben sus ex colegas, siempre solidarios con lo peor, lo más impresentable. El desenlace en el país andino es aún muy inseguro. 

Pero el movimiento democrático en Bolivia, al igual que el de Hong Kong frente a la República « popular » china, ha dado ya un ejemplo al mundo, a 30 años de la caída del muro de Berlín : el final de las dictaduras comunistas (o bolivarianas o socialistas del siglo XXI, como las quieran llamar) se está vislumbrando. 

Que se cuiden todos los tiranos que se van a reunir en La Habana, junto a sus cómplices. Su turno llegará, junto con la democracia, que nada tiene que ver con golpes de Estado inventados por los que nunca han querido ver lo que es el « socialismo real ».

IMAGEN/TSUJI Naoki