EN EL BOSQUE DE LA NO EXISTENCIA. Poema de Juan Carlos Recio

Magritte 

EN EL BOSQUE DE LA NO EXISTENCIA.

Haría con tenerte una gran pira, 

un giro alrededor de lo que quema

un dispar de tu gloria cuando las manos bajen 

y las columnas se derriben 

sin alterar el fuego 

es decir, haré de tu ceniza un bosque

mientras 

te volvería a dejar allí 

donde la nada nace.

He rodeado tu aureola 

mientras bebo un anís 

que compré en un mercado árabe 

y la vi en la tenacidad de una mente dispersa.

Crucé los adioses para seguir a su lado

y fui tan veloz hacia arriba

que también soy ese bosque de la nada 

que han incendiado.

Hacia arriba veloz uno desaparece

se va del aire se convierte en aureola 

y cuando te bajas ya nadie te conoce

como un instinto suicida que se nos fue

del calor de un fuego

que solo se prendió en la mente.

Haría cualquier hazaña 

porque tus cenizas las tocara una música 

más profunda que la nada de un bosque 

rodeado por su inmensidad perpetua

más he estado solamente en el impulso d

e la velocidad hacia arriba 

y se me olvida regresar de la mente 

que imaginó 

tu boca en el cristal 

de una puerta que precisa 

un fuego eterno.

Y después salí 

del medio de la nada

y todavía no comprendo

si vuelvo para ser yo

o el que se traiciona.

Juan Carlos Recio Martínez.