Las palomas continúan cagando sobre sus cabezas.



siguen armando y desarmando pero sin gran entusiasmo porque el tiempo está muy feo y las palomas, aunque ellos griten para espantarlas, continúan cagando sobre sus cabezas.



como si siempre se equivocaran y estuvieran acostumbrados a rectificar, esto es kafkiano...

Commentaires

Articles les plus consultés