David Lago González, Cuba, 1950 – Madrid, 2011 Poemas de 4C
4 C- Últimamente, al soñar,
aparece en cada sueño un componente
que fluye a lo largo de él
y sólo se detiene al despertar.
No sé qué significa en la simbología
onírica:
siempre olvido la llamada de los
símbolos,
y tampoco me obsesiono por ver una
segunda sombra tras cada trazo,
excepto en mis estados de paranoia
cuando siempre hay una razón para
mirar atrás...
Mucho menos pretendo basar mi vida en
flechas,
círculos o laberintos de cualquier
religión en la que no nací.
Pero aquí se despliega El Agua todas
las noches.
No es la inquietante gota de agua
que Andrei, angustiado, dejaba caer
en cada uno de los versos que veía,
dentro de un lenguaje de códigos que
sólo los del gulag
arrogantemente suponíamos descifrar.
Si no.
Es un agua que discurre
continuamente,
de manera tranquila, reposada pero
incontenible.
No sé de dónde viene, no veo ninguna
boca de manantial;
no sé dónde va: cuerpo abajo, calle
abajo
pies,
largos pies de una sombra que se
pierde,
refresca taaaanto la piel arrugada.
Pienso en algo que limpia,
purifica;
o en algo que indefectiblemente rueda
para desaparecer y borrarlo todo.
Comienza desde cero, la gota.
Comienza desde cero, manantial.
Pienso en ti, metida en mi cuerpo
ahora.
No sé si vienes a decirme que estás
aquí
para limpiar mi suciedad
o para anunciarme que partes
definitivamente,
para siempre, de mi lado...
dejándome a un lado,
dándome de lado.
Recuerdo,
como si lo hubiera vivido,
cuando Virginia Wolf, lentamente, iba
entrando al río.
David Lago González, Cuba, 1950 – Madrid, 2011
4 C, Editions Hoy no he visto el paraíso, 2013
al cuidado de Margarita García Alonso.
LIBROS EN BUBOK
al cuidado de Margarita García Alonso.
LIBROS EN BUBOK
Commentaires