no se entero.
Dos veces, solo dos veces en mi vida. La primera fue en el Vedado. Pensaba en C. y rompía, literalmente traspasaba las paredes de los edificios. Todas las tardes hacia el ejercicio, sentada en la azotea contaba la fuerza de ese querer por los muros que desaparecían. Cada ladrillo que caía y yo del otro lado todavía deseando pasar otra pared. Lo más lejos que pude llegar fue de la esquina de O y 27 hasta el capitolio.
Luego fue el exilio, una época de ruinas, frio y mudez; hasta que hallé a A. y el fenómeno volvió a apoderarse de mi pecho. Pecho y cabeza al unísono, pero esta vez no trasgredía casas ajenas.
Me dio por fundar una ciudad, hice parques, bancos, cafés, fuentes, palacios… a la entrada de los edificios puse quicios donde podía sentarme y ocuparme de los detalles: que los arboles tuvieran las hojas limpias, las motos aparcadas en la esquina incitaran al viaje, el pan estuviera caliente , en los charcos se reflejaran escenas multicolores y por la pequeña ventanita del baño ondulara la ropa que se secaba al sol.
Baldeé cada adoquín, gasté pinceles en el afán de que todo estuviera a su justo color… la habité de paseantes vestidos a la usanza de todos los lugares del mundo; no olvidé la música suave, y provocadora como fondo…siempre una melodía desde un balcón, o una planta, una enredadera de preferencia.
Cada día extendí el dominio, siempre preguntándome, ¿llegué al final del querer? “No”, me respondía y acto seguido como una hormiguita sembraba jardines, ajustaba pasamanos, luces, esculturas, y nuevas fuentes.
Todo pulí y puse en plaza…y me extendí en poblados, moví tierras, bauticé montañas; horadé el subsuelo, abrí metros y bocas de metros para no tardar en regresar a casa y saber que sus pies arqueados sobresalían de la colcha azul.
Me esmeré. Inauguraré un aeropuerto, y una estación de trenes con palmeras en su interior, donde hallarle cada amanecer de regresos.
Ahí está la ciudad que hice, llamada Madriz, para que él la recorra sin saber.
Olvidé decirles que fuera de ella el planeta es de una oscuridad que espanta.
Bruce Branit ha creado el corto World Builder, que les ilustra mi hacer.
Commentaires
No me equivoqué al decir que eres de ley.
Un beso muy grande y un abrazo muy fuerte
Niurki
Bss
lunes 15 de junio de 2009
DISIDENTES, y disidentes
http://theplacewherenothingisreal.blogspot.com/2009/06/disidentes-y-disidentes.html
Isla corporal
por José Luis Sito
http://cubainglesa.blogspot.com/
besos
19 de junio - 6 de septiembre
Sala de exposiciones Alcalá 31
Vicepresidencia, Consejería de Cultura y Deporte y Portavocía del Gobierno de la Comunidad de Madrid
Inauguración: 18 de junio a las 20:00 horas
Entrada gratuita
Actividades paralelas: visitas guiadas y proyección de la película documental Life Through A Lens (Una vida a través de la cámara. 83 min.)
Crédito: Annie Leibovitz / Nicole Kidman, New York, 2003 / Fotografía © Annie Leibovitz (Contact Press Images) / De Annie Leibovitz: Vida de una fotógrafa, 1990 – 2005. Cortesía de VOGUE.
La Vicepresidencia, Consejería de Cultura y Deporte y Portavocía del Gobierno de la Comunidad de Madrid presentará el trabajo de la fotógrafa Annie Leibovitz en la exposición Vida de una fotógrafa, 1990-2005 el día 18 de junio de 2009 en el histórico edificio de la Sala Alcalá 31, coincidiendo con PHotoEspaña 09. Esta exposición ha sido producida por el Brooklyn Museum en 2006 con el patrocinio de American Express. La muestra en España está patrocinada por Vanity Fair.
Un álbum de familia, una exposición integral y un diario personal: Annie Leibovitz combina las fotografías de su vida privada con su trabajo profesional en una perfecta fusión que constituye una crónica de los acontecimientos, los encargos oficiales y las historias personales que han llenado sus últimos quince años.
Desarrolla tu creatividad donde más a gusto y feliz seas, La Marga como ciudadana del planeta Tierra, y deja de pensar en lo que podia haber sido y no es.
Muchos Besossssssssssssssss
mjesus
a los que quiere perder, sino también
a los que quiere salvar.
Fra. Erasmo, el eremita
After the rain has fallen (Sting, “Brand New Day”)
para Marga
Después que haya caído la lluvia,
después que la lluvia haya limpiado
el pegadizo y espeso polvo del progreso,
y aunque la flor no brote de inmediato,
las hojas lucirán su contento de corazón enamorado,
y todo volverá a ser como antes,
como si ni siquiera nadie haya dado nunca
con la maravilla electrificante de la luz.
Adoré en la gota de agua que sostuvo sobre la hoja
el cristal del dios convertido en destello del sol,
límpido, puro, eternamente nuevo;
y sonriente.
Me devolvió la vida de siempre,
y en la piel del Murano frágil te vi,
otra vez burlándote de mí.
Otra vez volviendo al primitivo aliento
de las cosas simples y naturales.
He de darte las gracias, día,
por otro amor reluciente a la puerta de mi casa;
otra razón, por muy momentánea que sea,
para esperar la próxima lluvia.
.
(Madrid, 17 de junio de 2011)
© 2011 David Lago González