Moscow does not believe in tears

 

- El primer ministro israelí, Netanyahu, advierte contra "ciertos enemigos que planean atacar de nuevo a Israel". - AFP

Declaración del primer ministro Benjamín Netanyahu sobre la liberación de rehenes

Ciudadanos de Israel, hermanos y hermanas.

Esta es una noche emocionante. Una noche de lágrimas, una noche de alegría.

Porque mañana volverán los hijos a casa.

Es un acontecimiento histórico que mezcla la tristeza por la liberación de asesinos y la alegría por la devolución de rehenes.

Debo decirles: la campaña militar no ha terminado.

Aún tenemos desafíos de seguridad muy grandes por delante.

Parte de nuestros enemigos intentan reconstituirse para atacarnos de nuevo.

Y como decimos — “estamos encima de eso”.

También hay grandes oportunidades que no conocíamos — precisamente por las victorias que logramos.

Estoy convencido de que con fuerzas conjuntas superaremos los desafíos y aprovecharemos las oportunidades.

Juntos continuaremos fortaleciendo a nuestro país,

juntos seguiremos ganando,

y con la ayuda de Dios — juntos aseguraremos la eternidad de Israel

Debemos terminar el trabajo.

Hay un Creador en el mundo Y si la liberación de los rehenes ocurre en Simjat Torá, como todos esperamos, eso solo confirmará que el 7 de octubre fue un proceso guiado por el Creador del universo. En la Torá se enseña que el séptimo día de Sukot —Hoshaná Rabá— es el último día en el que todavía se puede cambiar el destino mediante las plegarias al Creador del mundo. Ese día se sellan los decretos que fueron escritos en Rosh Hashaná y firmados en Yom Kipur, y por eso está lleno de súplicas y oraciones. Al día siguiente, en Simjat Torá, comienza a manifestarse lo que fue decretado… Y no por casualidad, en una época donde aparecen personas necias que creen que burlarse de la fe de otros les da grandeza o prestigio (probablemente pobres almas que crecieron en un hogar así), y por unos “me gusta” se atreven a reírse de la religión, precisamente en ese mismo tiempo el otro lado muestra milagros evidentes.