Nadie salta de una relación a otra más rápido que un narcisista que no tiene dónde dormir.
Nadie salta de una relación a otra más rápido que un narcisista que no tiene dónde dormir.
Este tipo de narcisista no está interesado en el amor, en sanar ni en construir una conexión real — está interesado en sobrevivir, en mantener su imagen y en encontrar su siguiente fuente de suministro. Cuando siente que su situación actual se le escapa de las manos —ya sea porque lo descubrieron, porque está enfrentando consecuencias, o simplemente porque ya no le funcionan sus manipulaciones— entra en modo de pánico. ¿Su prioridad número uno? Asegurar el siguiente lugar donde aterrizar. Una nueva casa. Un nuevo proveedor. Una nueva persona a la que drenar emocional, mental y económicamente. O todo al mismo tiempo.
Se mueve con urgencia, pero no porque esté destrozado o emocionalmente involucrado con alguien. Lo hace por interés. Es una transacción. El narcisista siempre está buscando a alguien que le crea sus historias tristes, que ignore las señales de alerta, y que le dé lástima y cobijo sin darse cuenta de que lo están manipulando para vivir el mismo ciclo de abuso y manipulación de siempre.
No se detiene a reflexionar. No asume responsabilidades. No dedica tiempo a sanar. Solo cambia de máscara, se inventa una nueva historia y se hace la víctima con alguien más —a veces en cuestión de horas o días. Para el mundo exterior, puede parecer que "superó todo muy rápido" o que "ya volvió a ser feliz", pero en realidad, solo está repitiendo el mismo patrón, usando a una nueva persona para tapar las mismas heridas que se niega a enfrentar.
Si alguna vez fuiste reemplazado así de rápido, grábate esto: nunca fue amor. Siempre se trató de lo que podías ofrecerle. Y ahora, esa nueva persona está siendo usada exactamente de la misma forma.
Tú no perdiste algo real —escapaste de algo tóxico.



Commentaires