LOS DE LA PERDIDA, por Juan Carlos Recio Martínez.

Albrecht Dürer - Sketch of a Table Fountain. N.d.

LOS DE LA PERDIDA.

Y no es el amor en su profundidad suficiente 

ni te garantiza ese puesto de vigía 

que avisará al deudor

la vista y el horizonte.

El hijo pródigo si es.

Y todas las veces que te ignoren

ocupados en resolver

esa culpa que no cargan

aquellos a los que debemos socorrer

en su desidia o su desvarío.

Ha sido y será 

como el bien que ya fue creado

y como la felicidad que es un sacrificio 

no para renegar, 

a veces ni siquiera se trata de lo que entiendas 

ya te dije, que uno se vuelve a recomponer

como un vaso servido en la posteridad del miedo.

Ahora, levántate y escucha,

la vida que vivas no te pertenece

fue concebida para el regreso;

de nadie y de nada te servirá 

que acuses al prójimo 

como si no fuéramos 

polvo del polvo de lo que damos,

y en ello, una distinción,

nos separara.

Se trata de hacerlo:

-el pensamiento del bien-

antes que dejes de moverte,

sin los sentidos, 

como la presa que ya no pudo huir

ni de su escalofrío.

Juan Carlos Recio Martínez.